El 14 de noviembre de 2013, el diario Clarín anunció que fuentes diplomáticas señalaban que la presencia de la DEA en Argentina se reduciría a un sólo agente, contra los 3 que hasta entonces operaban. Desde aquella fecha, los acuerdos y pedidos dirigidos por las provincias a distintas áreas de seguridad de Estados Unidos han ido en aumento. El Ministerio de Defensa de nación, informó en enero la compra de 35 vehículos militares Humvee a EEUU, en momentos que el ministro Agustín Rossi anunciaba que el Ejercito se encargaría de patrullar las fronteras norte del país. En ese mismo mes, el gobernador de la provincia de Santa Fe Antonio Bonfatti viajó a Estados Unidos para luego celebrar que el FBI colaboraría en la instrucción de policías santafesinos.
Carlos del Frade es autor de “Ciudad blanca, crónicas negras”(2001) y “Narcomafias”(2013), así como de una gran cantidad de artículos sobre el narcotráfico. En comunicación con Rap, señaló que a los acercamientos de Santa Fe y el gobierno nacional hacia las agencias estadounidenses, se le deben sumar la provincia de Buenos Aires, Córdoba, San Luis, Mendoza y Salta. Si bien los acercamientos provinciales fueron varios, el gobierno nacional ha tenido un rol vacilante. El 4 de mayo, el Secretario de Seguriad Sergio Berni anunció que se “intensificaron los acuerdos de cooperación con la DEA para cruzar datos y organizar cursos de capacitación”. Sin embargo, dos días después, negó que se hayan firmado convenios e incluso fue más allá sosteniendo que los Estados Unidos “importan droga y exportan muerte”. De todas maneras reconoció una “actividad recíproca” con la agencia estadounidense, agregando que “venimos trabajando hace 2 años”.
“Me parece que claramente, el verdadero patrón del mal que es el imperio norteamericano, se va a meter en los barrios de nuestras grandes ciudades”, sostuvo del Frade. En este sentido explicó que la incursión de la DEA en la Argentina no se traduce en menos crimen organizado, sino en más control social, “porque luchar contra el narcotrárfico es luchar contra el capitalismo, y claramente si hay alguien que no lo va a hacer, es Estados Unidos”. Como ejemplo de la situación, nombró el caso de Brasil, Colombia y México, donde las llamadas “guerras contra las drogas” impulsadas por EEUU, han implicado una militarización de los barrios más humildes, así como la pérdida de decenas de miles de vidas.A partir de este acercamiento, el periodista estipuló que “no va a haber provincia que pueda escapar a la lógica de lo que suponen las encuestas que dicen que la inseguridad es un problema y para dar una sensación de seguridad van a llegar los gendarmes como ángeles incorruptibles capaces de vencer al demonio de la droga”. En este sentido agregó que “me parece que es mentira porque las fronteras donde entran toneladas de cocaína son vigiladas por esos mismos agentes”.
En un análisis histórico, del Frade, señaló que desde su creación, en 1973, la DEA buscó incursionar en Argentina: “Lopez Rega copia todos los conceptos, y a partir de ese momento la implementación de sus políticas son casi paralelas a lo que desarrolla Estados Unidos como control político a lo que llaman el patio trasero”.
En el caso de Santa Fe señaló que en el gobierno de Carlos Reutemann, durante los 90', al nombrar como Secretario de Seguridad al ex agente de la SIDE, Enrique Álvarez, lo primero que hizo fue contratar expertos del FBI y la DEA para brindar entrenamiento a la policía. “El resultado fue se cuadruplicó el narcotráfico en la provincia”, sentenció del Frade.
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